"El arte que trasciende, que ayuda a ver y encontrar al otro, que es expresión de la tradición y de la renovación de la fe y de belleza". Benedicto XVI

martes, 30 de octubre de 2018

Enseñar a callar


El experto en hablar, enseña a los demás a callar, pues descubrió que esto era una gran medicina para encontrar la tranquilidad.

Tomás Moro. Epigramas

jueves, 25 de octubre de 2018

Lo que esconde la nada


Lo que puede esconder la nada es, en primer lugar, el amor propio, los respetos humanos, los pensamientos y preocupaciones de cosas de la tierra, el hacer las cosas como por costumbre, el obrar con cierta satisfacción propia, el seguir en algo la voluntad propia y otras cosas semejantes. Todas estas cosas son estorbos que se ponen delante de esa nada, y el alma, al no verla a causa de tales impedimentos, se detiene , y este detenerse es volver atrás. ¡Oh Dios, qué daño se origina de aquí al alma!

Verónica Giuliani. En la escuela de la nada.

sábado, 20 de octubre de 2018

Todo el territorio



El cáncer no me ensombrece la alegría de estar en este maravilloso mundo,  y con esta alegría entraré al otro, siempre en territorio de Dios.

Facundo Cabral. Sus últimos correos

martes, 16 de octubre de 2018

El despertar de las lágrimas


No es el conocimiento lo que nos acerca a los santos, sino el despertar de las lágrimas que duermen en lo más profundo de nosotros mismos. Entonces únicamente, a través de ellas, tenemos acceso al conocimiento y comprendemos cómo se puede llegar a ser santo después de haber sido hombre.

Me apagué a las apariencias cuando comprendí que sólo había algo absoluto en la renuncia.

E.M. Cioran. De lágrimas y de Santos

viernes, 12 de octubre de 2018

Una llama, una llamada ...


Oh Dios que me habeís dado ya eternamente lo que a mis ojos es la materia de una angustia incierta, haced que mi libertad se adhiera siempre a vuestra voluntad.

Dios que tenéis un conocimiento maravilloso de mi: haced que yo sea lo que espero, puesto que mi futuro descansa ya en vos.

Solo concibo la oración como una llama, un cohete, un grito, una llamada. Eso es la oración, en su esencia: una consciencia de relación, una efusión de ntimidad, una plegaria-sustancia, la sustancia de mi vida y de mi consciencia y de mi insconciencia todavía más...

Jean Guitton. Lo que yo creo

miércoles, 10 de octubre de 2018

La alegría


¡La vida no es triste! Al contrario es muy alegre. Si dijeses"el destierro es triste" te entendería. Se comete un error al dar el nombre de vida a lo que tiene que acabar. Sólo se puede dar de verdad ese nombre a las cosas del cielo, a lo que nunca jamás morirá, y por eso, la vida no es triste, es alegre, muy alegre

Teresa de Lisieux. Últimas conversaciones

lunes, 8 de octubre de 2018

Sutil


Desde la tierna infancia escuchaste 
todo soplo en lo más íntimo del alma,
y que sólo el silencio más profundo se percibe.
Y como toda criatura, que sin volverse
ya hacia delante o hacia atrás, animadamente va,
segun el aliento del Espíritu que las empuja,
así seguiste la sutil llamada,
¡dócil instrumento en manos del Señor!

Edith Stein. Yo estoy siempre en medio de vosotros

sábado, 6 de octubre de 2018

La reconciliación


Cristo crucificado atrae hacia si todo cuanto hay en el hombre; en Èl se reconcilian todas las cosas, pero a la altura de su corazón.
He aquí una religión que tiene exigencias morales más elevadas que ninguna otra, puesto que sólo el heroísmo de la santidad puede satisfacerlas plenamente, y que al mismo tiempo más que ninguna otra, ama y protege a la inteligencia. Yo digo que éste es un signo de la divinidad de esta religión.

Jacques Maritain. Arte y escolástica

miércoles, 3 de octubre de 2018

Dios no olvida


Estamos vivos porque Dios no olvida, 
juntos en su memoria, y es por eso
que, nuestra comunión eternizando,

a cada instante nos da nueva vida
y el alma cumple su fatal progreso:
nacer, amar, morir, seguir amando.

María Elena Walsh. La comunión de los vivos

lunes, 1 de octubre de 2018

La aridez




Aquél a quien le ha tocado una vida áspera y llena de renunciamiento en el plano espiritual, si s fuerza con buena voluntad por tener fe, ante Dios es verdaderamente un creyente, a pesar de toda su aridez y de todas sus dificultades. Ese hombre no puede hacer más que creer, creer esperanzadamente ..., y debe hacerlo.

Romano Guardini. La experiencia cristiana de la Fe